Calle... y acontecimiento

circuitos preconcebidos superpuestos, como una "transparencia'' sobre la ciudad anesteciada precisamente para traerla y asegurarla catcgorialmente en la apariencia como su verdad . Entonces. si se tratad optimizar la ciudad (de hac rla, como su l dccirs , "'h bitabl "), llo consist n as gurar los itin rarios comunicante • l · ircui os qu determinan la rutina de los itinerario prefijados. La ciudad como la utopía del circuito, tránsito sin calle · esto es. viaje sin roce y sin paisaje. Comunicación sin' ruido". ~as calles, como trama fisiológica de la ciudad (como "arterias"}, han de servir a la comunicación entre un punto y otro . P ro, claro, entonces no se trata de la caJle , síno de la linea (la del metro por ejemplo) . La lin a , g sto fundacional que, s ·gün sostfon Worring r, "d acuerdo a la ujeción a una 1 y puramente g ometrica, debía ofrecer la ma or posibilidad d dicha aJ hombre confundido por la caprichosidad y confusión de los fenómenos (...): en ella hay ley y necesidad, micntr que en todas partes impera Ja arbitrariedad de lo organi o". Hemos de sop sar la gravedad de lo qu ho dí ho Julio Ramos en l pasaj · qu · it · b .mo. m · _ arrib• . L· ' 11 . 1 in ubordina íón d l igniCic . Qu lo mat ·rí, l ·• i ·ualc de la ciudad -la caJl l s squin- , la v r ·d· :,-, pu dan ser habitados; como los restos de una geometría in rosimil , como las ruinas de un templo (como la obra de un Días loco o -lo que vi ne a ser lo mismo- de un autor" multípl ). ignifica qu ran ransform da n lugar s, u· se· n, puc , cargadas d p quena hi · torias . C mo si hid - ramo una fogata para abrigarnos en uno de )os angulas d • un lriángu lo equilátero; como si un ángulo fuese un rin ón . Y no se trata de una débil épica de la m grnuHdad o de una "moral" d lo rincon , ino má bien d · in l p · tica fenomelógica de la calJ como deseo . En f · t , ·l h izonte, - tanto ideológico como estético- , de la "insubordina ·ión de la calle es la ciudad, así como -de un mod 111 lo o- la transgresión local de la paJabra es siempr · ·1 1·ngu Je. El d -o d la can no • sino 1d s o d ciudad , pero d una iudad imposible: la ciudad del d seo. La estética espacializante opera, en su v 'f08lmil p lítico, 10

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