Calle... y acontecimiento

· R corriendo algunas ca11es al mcdíodia no ei extraño el encuentro con itúinidad de manchas y objetos medio incrustados por ahi que no e taban el dia anterior. Son comunes aquellas manchas de pintura en La calzada como i hubiesen sido arrojadas prccipita.damente en la madrupds, e parcidas sólo según el azar de la calda o el gesto de voltear un tarro de pintura.. Más do aJgun vez me ha quedado zumbando l pregunta por aqu -lacto, generalmente incomp.rensibt ai lo 1,up0nc.mos intencional, tal v~ lo mas tmple ea lo ccid n I del e.e.Ida desde una camioneta. Sin embar o en esto no hay ccrlet.a posible que venga re olver 1 inquietud que pudíera producir ta huel!Jl de aqu Uo que s bemos aconteció anoche, a espalda. de nuestro sueño y que ni siquiera podemos afirmar que lo que queda íue apen lo enrabi do de un to inasible para siempre. Ricardo Viilarrocl y Claudia Mon alves. encontraron una noche, al término de un de n\lé$tras reuniones, un pequeño pingüino de plástico que alguien dejó abandonó en la enLrada de una easa. Aquello pudo I lvldo de un niño... pudo ser también una ofrenda y el inicio de otra co . C-Ort.Azar lo ró imnginnr el amor hacia una mujer que deJab su atro en los muros con tiza de colores. Noche noche enlazaban sus dibujos que nunca tendrán entido mas que para ello , ha ta ese din que logró enLreverl cuando era detenid , Hay m nchas a2ule de úerra n disolución. En Sale ianos con Ora.n venid alguien recogió las tarjeta con la im gen de un niño con u perro que rodeaban al que duerme en las escalinatas y la puso tras la reja y adentro de la gruta de un santo rodeado de vel y que era la protección del que dormia. El agua de uno de esos vaso que aparecieron duranle cuarenta días el vados por Santa Isabel ya se h.abia evaporado en la luz ele un día que le era exlraño...Sin embargo la fmagen del niño desaparece toda 1 s mal'ianas de lns puertas de la casas. 4