Resistencias: Foro de las Artes 2020
127 C A B E Z A D E C O S M O N A U T A * cristián keim palma ciales y de los cuerpos que hacen que la perspectiva de la realidad en la que se desenvuelven, se fragilice. Por ello, la salud mental en el ámbito de la “psicología del cosmonauta” ha sido profusamente difundida en estos meses de encierro. Nos hemos encontrado de pronto como cosmonautas en una lata de sardina, ob- servándonos y observando a los demás, relacionándonos, con la idea de la muerte mucho más presente en nuestro cotidiano que lo que ha- bitualmente acostumbramos. Tengo la impresión de que esta cabeza de cosmonauta ha llegado para quedarse y estará pulsando en nuestros cuerpos mucho más allá de lo que imaginamos, hemos atravesado una frontera y el cerebro ocupa redes neuronales distintas a las que normal- mente utilizaba para hacer entender comunicar y ejecutar determinados procedimientos que el “en vivo” cerebral ejecutaba de otras maneras y con otras redes. Sin duda el cerebro se relaciona de manera muy diferen- te en una comunicación mediada que en una que ocurre directamente. Lo anterior es probable que esté haciendo que nuestro cerebro se ex- panda para poder procesar y utilizar la información que ahora percibe resignificada y por otras vías, que requieren de otras maneras de com- prender y actuar; esperemos que estas nuevas maneras de comprender y la distancia con la que nos estamos observando, hagan que la huma- nidad y sus procesos creativos aprovechen el instante de reflexión en el que aún estamos sumidos. Fue hace más de un año Las artes de la representación se concretan y operan en último término, en una relación directa entre los ejecutantes y el público que presen- cia esa acción. Este principio basal comenzó a volverse muy dificultoso a partir del estallido social de octubre de 2019, especialmente en los espacios tradicionales de representación que suelen estar situados en los centros urbanos, los que fueron copados por el estallido y su larga consecuencia de etcéteras. A partir de lo anterior, muchos proyectos artísticos se vieron suspendi- dos a la espera de mejores condiciones para su realización, pero como sabemos, sobre esta espera llegó la crisis sanitaria global más relevante del último siglo y la suspensión y el encierro se convirtieron en una condición permanente. Al primer shock que significó el cierre de los diversos espacios de exhibi-
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=