Cambio climático y desastres naturales : una perspectiva macroregional

60 El cambio climático y Chile tas efectivas a muchos de los problemas climáticos que se han dilatado demasiadas décadas. La Urgencia de la Acción deberá comprometer a los Gobiernos y a los Estados y a la creación de un ánimo decidido de colaboración renovado y esperanzador. Las consecuencias inmediatas de la Pandemia remecen a los sectores productivos consecuencias inmediatas de la Pandemia remecen a los sectores productivos empresariales, a la industria de todos los sectores, al comercio y al transporte internacional. También asisti- remos a nuevas articulaciones económicas y financieras, a lógicas que vinculen estrechamente lo productivo con lo financiero, y a abrirse decididamente hacia el enfrentamiento de las desigualda- des socioeconómicas como elemento clave en la construcción de sociedades inclusivas, estables y resilientes. Mientras escribimos este texto se desarrolla la Pandemia en todas sus dimensiones y es altamente probable que estemos asistiendo a un “cambio de épo- ca”, que nos lleve a formas organizativas sociales y productivas de nuevo carácter. Las sociedades a nivel global han tenido que asu- mir las lecciones de un “enfrentamiento colectivo”, con una enor- me valoración de las sociedades organizadas y de políticas públicas “de nueva naturaleza”, que se abran positivamente a enfrentar también la batalla colectiva por el cambio climático. La crisis climática mundial ha tendido a agravarse en los últimos años como muestran los antecedentes de que en varios meses del 2019 la temperatura media de la tierra alcanzó sus máximos mun- diales y que, en opinión de círculos científicos de primer nivel, ha- bría que “multiplicar por tres” los esfuerzos mundiales de reduc- ción de los GEI para no sobrepasar los dos o el 1,5° C que se han establecido como limites claves de la acción humana este Siglo. Ello ha provocado de modo directo la acentuación de fenómenos de Sequia estructurales en muchos territorios y una alteración im- portante de los regímenes de lluvia, acentuando su disminución Con lo complejo que es establecer un paralelo, la Crisis Climá- tica Mundial, asume características similares a esta pandemia. Tenemos amenazada la especie humana directamente en su so- brevivencia, la de muchísimas especies vivas, la de la mayoría de los ecosistemas naturales, la relación humana con los Océa- nos, las perspectivas de nuestra alimentación y subsistencias fu- turas. De esta manera, comienzan a analizarse los vínculos y relaciones con la temática del cambio climático. Lo pesimistas que sugieren la postergación de metas ambientales y producti- vas en función de la crisis sanitaria, con un correlato en la pre- destinación de recursos públicos, y una disminución en las do- naciones climáticas en función del coronavirus. Por otra parte, los optimistas, como los 13 Ministros del Medio Ambiente de la Unión Europea, sostienen que la reactivación posterior debe ser compatible con la transición energética no carbonífera y la protección y restauración de los biodiversidad para controlar el tránsito de los virus desde la vida silvestre 37 . En consecuencia, disponemos de una “estrecha ventana de tiem- po” para construir una respuesta universal básica y elemental, para generar condiciones efectivas para una acción de coopera- ción internacional de nuevo tipo y envergadura, para ser recepti- vos a los estudios y las investigaciones proyectivas de la comunidad científica y para generar condiciones para una respuesta de la hu- manidad toda. Esas son las circunstancias dramáticas y particulares en la que se van desarrollando los trabajos hacia la COP 26 en Glasgow. Este “remezón mundial” que afecta tan esencialmente la naturaleza humana, es la oportunidad, quizás única, para articular respues- 37 La crisis por la Pandemia podría afectar el combate al cambio climático, El Mercurio, 18.04.2020