La memoria de la educación : historias y obra de galardonados y galardonadas con el Premio Nacional de Educación de Chile

LA MEMORIA DE LA EDUCACIÓN Historias y obra de galardonados y galardonadas con el Premio Nacional de Educación de Chile 250 que destacaba Gabriela, se ha perdido cada vez m s, aplic ndose en propuestas instrumentales y limitadas, que parcializan y encierran a los ni os y sus aprendizajes. Las “habilidades blandas” que hoy diferentes autores preconizan como relevantes desde otros marcos referen- ciales, no dejan de ser sin los antiguos aprendizajes que “la escuela nueva” preconizaba. Por tanto, nuevamente se evidencia la vigencia del pensamiento pedagógico de Gabriela sobre la escuela y su propósito esencial, y el llamado urgente a su implementación efectiva, en beneficio de los ni os y una educación m s humana, centrada en lo profundo. Así lo expresó Palma Guillén al analizar el sentido principal de la obra poética de Gabriela orientada a la infancia, al se alar:“se cae por su peso y no hay, por tanto, ni que hablar de ello, que la escuela primaria tiene que ense ar a leer, a escribir y a manejar un poco los n meros y que debe introducir a los ni os en el conocimiento de la naturaleza que los rodea y en el amor de su país, y que debe, adem s, darles h bitos de orden y de trabajo, pero lo m s importante en la escuela era para Gabriela en ese tiempo – y creo que lo fue siempre – ense ar con el juego y con el canto la unión de todos los seres, la paz y el amor y el respeto de la naturaleza”. 2.3 SOBRE LA EDUCACIÓN DE LA PRIMERA INFANCIA Y SUS INSTITUCIONES. (KINDERGARTEN/JARDÍN DE INFANCIA). “La enseñanza una de las más altas poesías”. Probablemente, 1917. “…” ¡Cuánto, cuánto queda por cantar del hogar y de la escuela! ¡Si parece que nada se ha dicho todavía, que está virgen esta cantera del alma, que la cuna y los juegos y la sala de clases no estén llenas de sugestiones, que los poetas no han querido recoger por ir a vocear en la asamblea! “La reforma educacional de México”. París, junio-julio 1926. “Esta Normal de Maestros (del D.F.), se diferencia de las de Chile en que contiene, al lado de la primaria anexa, un kindergarten, cosa indispensable para el estudio completo del niño. El nuevo Director, señor (Lauro) Aguirre, ha sacado el Kindergarten al aire libre y mudado por el trabajo de la tierra y el contacto con los animales, los “dones” muertos con que jugaban los niños en sus salas”. “El Kindergarten se ha aristocratizado en otros países, porque funciona anexo a los liceos o porque pertenece a la enseñanza particular que, generalmente, sirve a una sola casta. Aquí se ha seguido el camino opuesto y la dis- tribución de los trece jardines de niños corresponde a los barrios más populares, digamos a los más desgraciados de la capital. El niño que necesita más del canto, del juego, de la escuela con calor de entraña, es el niño pobre. Aumenta cada día el número de madres que trabajan en las fábricas y caminamos, gracias a esa barbarie, a la entrega de los hijos del Estado. A pesar de que en México es una de las ciudades menos febriles, ha visto claro y empieza a transformar estos jardines en hogares”. “La tendencia que ya anotamos al ocuparnos del kindergarten de la Escuela Normal, es la de los otros: el niño, que es la criatura más viva entre otros, jugará con la vida en vez del cartón y la greda”. “Una exposición de la infancia”. Francisca, enero 1927. “Fotografías de grandes Creches, tan bien dotadas como las yanquis, para decir “generosidad superlativa en la beneficencia: pouponnieres (guarderías infantiles), luminosas, repartidas en todos los barrios”.

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