La memoria de la educación : historias y obra de galardonados y galardonadas con el Premio Nacional de Educación de Chile

LA MEMORIA DE LA EDUCACIÓN Historias y obra de galardonados y galardonadas con el Premio Nacional de Educación de Chile 181 ESCUELAS NORMALES:UNA HISTORIA LARGAY SORPRENDENTE.CHILE (1842-1973) 59 Iv n N ez Prieto E st abierta la preocupación p blica y el debate sobre la formación de docentes. En muchas voces se expresa también la nostalgia respecto a los profesores/as formados en las ya desaparecidas escuelas normales. Un sentido com n nacional las supone mejores que la actual formación de docentes en las universidades. Incluso hay demandas formales para la restitución de aquellas instituciones históricas. Como es sabido, las escuelas normales tuvieron una larga trayectoria de servicio a la educación primaria y a la sociedad chilena. La primera de ellas fue fundada en Santiago, en 1842. Lentamente en el siglo XIX y m s r pido en el XX, se multiplicaron y desplegaron a lo largo del territorio. Sin embargo, fueron suprimidas en 1973. El Proyecto CONICYT Anillo SOC-17 quiere aportar insumos académicos al desarrollo profesional de los docentes chilenos, en el sentido de comprender históricamente la evolución de su campo de desempe o y el devenir de su propia profesión. Por lo tanto intenta reparar, con una investigación de largo aliento, la sequía his- toriogr fica respecto a la formación inicial de maestros primarios. Este artículo comienza con un breve recuento de los primeros hallazgos sobre el tema, referidos al período 1842 a 1889, y prosigue reflexionando sobre su proyección al resto de la historia de las escuelas normales. Las primeras escuelas normales El mejoramiento y la felicidad del pueblo fue el gran sue o de la elite que fundó la Rep blica. Esta aspiración debía lograrse mediante la difusión de las luces, que se alcanzaría principalmente por el acceso al saber mediante la educación. Era el medio probado y seguro para hacer efectivo el sue o ilustrado. Cómo derramar educa- ción para todos fue una interrogante que se resolvió descartando alternativas. La escuela como instrumento de ense anza simult nea fue acordada no sin antes considerar opciones como la educación “lancasteriana” o ense anza mutua. En la fórmula escolar de ense anza simult nea, era central el maestro o preceptor. En las escasas y precarias escuelas heredadas de la monarquía, existían unos pocos “escoleros”, término despectivo aplicado en la época a quienes ense aban en aulas primarias. En la sociedad que salía del coloniaje había pocas personas mínimamente capaces y dispuestas a desempe ar tal oficio. La multiplicación de escuelas tenía aquí su piedra de tope. A comienzos de la década de los a os de 1840 quedó claro que, sin perjuicio de seguir empleando personal improvisado, era indispensable que el Estado crease la profesión de preceptor, mediante una escuela ad hoc: la “escuela normal”, institución que ya existía en diversos países europeos y muy recientemente en los Estados Unidos. 59 N ez, I. (2010). Escuelas normales: una historia larga y sorprendente. Chile (1842-1973). Pensamiento Educativo , 46-47, 133-150.

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