Policy Brief : Cuerpos diversos e inclusión (in)subordinada. Una propuesta de políticas urbanas interseccionales

que a algunos/as se les deje vivir, aparecer y transitar con legitimidad en la ciudad o bien, tener privilegios y mientras a otros/as se les deja a medias o simplemente excluidos/as. Vivimos en los marcos de una ciudadanía nacionalista, ra- cista, patriarcal y heteronormativa. Sin embargo, frente a esta lógica de concepción ciudadana dominante, emergen agencias y resistencias que transforman las actuaciones in- dividualistas para caminar hacia perspectivas comunitarias. De esta forma, aparecen prácticas de redefinición de “lo co - mún” (Ostrom, 2011) a través sujetos afectados por el cru- ce de distintas desigualdades estructurales en ejercicio de prácticas colectivas de apropiación y colaboración (Méndez, 2015). Desde esta perspectiva participativa, se puede pensar la puesta en marcha de políticas “botton up”, es decir, políti- cas formuladas a partir de la consideración e integración de iniciativas ciudadanas. Como ejemplo ante la crisis pandémica, la emergencia de las “ollas comunes” puede ser un ejemplo de prácticas que no nacen desde arriba ante la iniciativa del Estado, sino que desde dinámicas “desde abajo” y lo popular, como formas de resistencia a la precariedad. Siguiendo a Butler (2017), pode- mos entender que las propias vulnerabilidades permiten la aparición de alianzas, movilizaciones y reclamos conjuntos por el derecho a aparición, perspectiva contraria al axioma neoliberal de individualización, donde la vulnerabilidad a la que ha sido llevada gran parte de la población a través de estos años está permitiendo el establecimiento de conexio- nes, demandas conjuntas, articulación de malestares y accio- nes colectivas en el espacio público, planteadas por Arendt (1997) como un “espacio entre” que va más allá de lo físico con objetivo de pensar la formulación de una alianza colec- tiva. Estas actuaciones nos invitan a disputar el significado de la “responsabilidad”, alejando el concepto del modelo libe- ral individualista que nos movía a una simple autosuficien - cia, para pensarlo solidariamente desde una visión colectiva frente a la sostenibilidad de la vida. 4. RECOMENDACIONES PARA LA POLÍTICA PÚBLICA: Se establece un cuestionamiento al Estado, al cual se le in- cita a adquirir un nuevo rol. Pensar una ciudad desde una perspectiva interseccional implica romper el a priori de las políticas públicas actuales que parte de fijar la mirada en un sujeto preexistente, estandarizado y afectado por un único factor de desigualdad, para girar la atención y mirar hacia las condiciones sociales que se entrecruzan en determinados territorios y que inciden desigualmente en la experiencia de sus habitantes. Este ejercicio de cambio de la política pública permitiría comprender cómo, en ciertos territorios se per- miten ciertas existencias y trayectorias de vida, y otras son cercenadas o explotadas, implicando entre otras cosas: • PARTICIPACIÓN VINCULANTE: Posibilitar que las polí- ticas surjan desde la ciudadanía, garantizando su carácter territorial y adecuación a cada contexto, potenciando una amplia participación, activa y vinculante de los residentes de un espacio determinado considerando su amplia diver- sidad y sus necesidades específicas. De la misma forma, asegurar que la política pública responda a las desigualda- des y no sea impuesta desde lógicas jerarquizadas: • Establecer mesas locales de trabajo vinculantes con dis- tintos agentes de la ciudadanía, de manera que se confi - gure la aplicación de las políticas públicas a nivel territo- rial. Labor que implica un ejercicio de democracia directa con objetivo de que efectivamente estas mesas no se mantengan sólo en un carácter consultivo, sino que en uno resolutivo. • Concretar presupuestos participativos vinculantes, que no respondan sólo a un porcentaje menor de presupuesto municipal, sino que puedan dirimirse entre una articula- ción ciudadana y los municipios con objetivo de atender a las necesidades más urgentes. • POLÍTICAS BOTTOM UP: Recoger las iniciativas ciuda- danas e integrarlas en un nuevo marco de políticas pú- blicas que considere los ejemplos del compromiso de las personas con su comunidad y la forma en que están re- solviendo problemas: • Concretar grupos de discusión con respecto a políticas ministeriales, con objetivo de avanzar en la elaboración de un método inclusivo y participativo de elaboración de políticas que asegure un mayor impacto social. • Llevar a cabo cabildos comunitarios relativos a la detección y priorización de necesidades, como también a la evalua- ción de las políticas implementadas a nivel territorial. Un buen camino a seguir puede ser el incorporar las asam- bleas territoriales que, en diferentes espacios a nivel nacio- nal, se han ido constituyendo después de octubre de 2019. 7 UNIVERSIDAD DE CHILE Vicerrectoríade Inves tigaciónyDesarrollo INVESTIGACIÓN INNOVACIÓN CREACIÓNARTÍSTICA POLICY BRIEF S e r i e D o m e s t i c a r l a C i u d a d

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