Optimización del riego en paltos y cítricos

de la noria y en (B) tubería torcida antes de entrar a la caseta de riego. Esto disminuye la eficiencia de succión del agua por la bomba, afectando la presión de operación. Matriz o principal . Es la tubería de mayor diámetro, generalmente de PVC y bajo tierra, que conduce el caudal requerido hasta las válvulas que permiten el paso del agua a un determinado sector de riego. Para limpiar esta tubería es recomendable instalar una salida o desagüe con una válvula manual en su extremo. Auxiliar o secundaria . Dependiendo de la topografía del terreno y el diseño del sistema, se puede necesitar una tubería que conduzca el agua hasta un sector de riego con el objetivo de disminuir las pérdidas de carga. Esta tubería generalmente se utiliza en sistemas de riego instalados en laderas de cerros, con la finalidad de disminuir la dispersión de caudales y presiones necesarias para los diferentes sectores, facilitando la elección de la bomba. Esta tubería puede ser del mismo diámetro que la matriz, incluso menor, pero nunca mayor que una terciaria o submatriz. Cuando es utilizada, en su extremo se instala la válvula que permite el paso del agua al sector de riego. Submatriz, terciaria o portalaterales. Estas tuberías generalmente comienzan a partir de la válvula del sector de riego y distribuyen el agua hacia los emisores a través de las laterales, cintas o mangueras. Son de menor diámetro que la matriz y la auxiliar. Sin embargo, se pueden combinar diferentes diámetros en el diseño, con el objetivo de disminuir las pérdidas de carga. Laterales o porta emisores. Generalmente son de polietileno (PE). En estas mangueras van insertos los emisores. En el mercado existe una amplia diversidad de laterales, lisas o con emisores incorporados, con goteros autocompensados, antidrenantes, exudantes, etc. Para sistemas con microaspersores, estos se acoplan a las laterales a través de un microtubo y son alineados y fijados al suelo con una estaca. Automatización Para facilitar la gestión del sistema, la mayoría de los proyectos de riego tecnificado incluyen una estación de automatización. Se trata de un dispositivo capaz de encender o apagar la bomba y enviar pulsos eléctricos a los solenoides de las electroválvulas para abrir y cerrar el flujo del agua a los diferentes sectores de riego. A través de este dispositivo se programa la frecuencia y el tiempo de riego de cada sector. La mayoría de los programadores disponibles en el mercado funcionan entre 24 y 60 volts requiriendo transformadores y baterías (dependiendo del fabricante y el modelo del programador). A su vez, los programadores envían pulsos eléctricos de 24 a 30 volts, para accionar las electroválvulas que dan el paso del agua a un sector de riego en particular. Para diagnosticar el funcionamiento de estos componentes (programador y electroválvulas) se debe contar con un multímetro de mano, seleccionando la opción voltímetro, con el sector de riego funcionando; se debe situar el terminal negro en la posición C del programador (entrada común) y el terminal rojo en la posición del sector que se está regando, asegurando un buen contacto de los terminales, como se muestra en la Figura 5. Los valores obtenidos deberían variar entre 22 a 30 volts. De igual forma, para diagnosticar