Caricaturas de ayer y hoy

ntroducción Este libro tiene que ser en broma, piensa uno cuando decide meterse en el mundo de los chistes v de las caricaturas chilenas; dicho de otra mánera, el mundo del dibujo humo– rístico chileno. Usted piensa también que tiene que ser un libro divertido, porque, te– niendo como protagonistas a Condorito, el profesor Topaze, Viborita o don Inocencio, la cosa promete como para una sesión de carca– jadas. Es difícil imaginarse a estos monos de la vida caricaturesca chilena posando de inte– lectuales graves, filosofand0 sobre su existencia, o, digamos, analizando desde una perspectiva histórica su relación con el ,periodismo chileno. Segunda reflexión equívoca: si Condorito }– Artemio son divertidos, ¡cómo lo serán sus autores! Respuesta: muy poco divertidos. La mavoría de los caricaturistas chilenos según Jo ie,·elaron las entrevistas y la apretad¡ biblia- grafía que en tomo a ellos existe, son tipos tristes, apagados, modestos, taciturnos, quita– dos de bulla y poco dados a la publicidad. Debe ser, en parte, porque en pocas oportu– nidades el dibujante ha sido un personaje dentro de la historia del periodismo chileno. A pesar de su importante contribución a "tan noble causa" (la industria periodística), recién se está tomando en cuenta como se merece el dibujo en las publicaciones periodísticas. El dibujo tiene una forma y un mensaje que ya lo hacen ocupar un rol importante en este mundo sitiado por las comunicaciones. Sin embargo, dibujantes y caricaturista~ chilenos los ha habido desde hace mucho tiempo, y su obra se conserva cuidadosamente archivada en la Biblioteca ~acional. En perió– dicos ,. revistas. 7

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