Caricaturas de ayer y hoy
delatan el apoyo de la revista a la Alianza Liberal y su oposición a los pelucones. En una supuesta apertura de sesiones del Congre– so se caricaturiza a un pastor leyendo el Mensaje, mientras los diputados y senadores pelucones, muy respetuosos, escuchan. Todos tienen cuerpo, patas y tpelaje de cabra. El Padre Cobos está redactado de manera tal, que constantemente dialogan un imaginario cura de la orden de San Francisco con Pero– grullo. Un ejemplo del diálogo, bajo el nom– bre de "Doctrina Vicuñista": "-Decidme, hi¡o, ¿hay candidato para la Presidencia de la República? "-Sí, padre, candidato hay. "-,<;uántos candidatos hay? "-Un solo candidato no más. "-¿J)ónde está el candidato? "-~n el cerro, en el Hano y en toda la Re¡ública. -¿Quién es ese candidato? "-Una curiosísima trinidad. "- ¿Quién es esa trinidad? "-Es Benjamín, es Vicuña y es Mackeuna, tres personas distintas en un solo candidato no más. "- ¿Quién lo hizo candidato? "-E! mismo Benjamín. "-¿Dónde se hizo candidato? "-En la montaña de Huelén Huala. "-¿Hí.zose candidato por obra del pueblo? "Benjamín, el popular, tras los sufra~ios del pueblo", se llama esta caricarura.
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