Caricaturas de ayer y hoy

sabe reír es el hombre. La Linterna, baío su semblante alegre y burlón, más allá de su .en– gua satírica y mordaz, alienta un corazón leal, y de ninguna manera se propone lastimar, ridiculizar tti emponzoñar sistemáticame1ite espíritus de personas, de coroporaciones y de partidos." Así rezaban sus editoriales. Otras de sus caricaturas no se compadecían eso sí con tanta, bondad de intenciones: en una aparecía el Cura Boh'le, de Osorno (muy conocido en su tiempo), con una dama en las rodillas, jun– to a una botella y dos copas. En otra, los siete pecados capitales simbolizados por actitudes de representantes del Clero. El autor de los dibujos, Benito Basterrica, nacido en 1835, permanecía en la oscuridad del anonimato. No firmaba sus creaciones, v 18 Padre Cobos: para atacar a don Ben1arnin. · pOr algo era el director de la revista el respon– sable de los efectos que ésta ocasionara. El lápiz de Basterrica causaba 1polémica, ) sin duda tuvieron que ver sus dibujos con el movimiento insurrecciona} que estalló el 8 de diciembre de 1858 en la Asamblea Constitu– yente. "Preparándose para la lucha" se llama una- caricatura que muestra a don Manuel Montt provisto de mazos y leyendo una lista de saqueos que se apronta a realizar. Basterrica era crítico 'político en 1a caricatu– ra. Ilustró en El Correo, La Linterna, El Charivari, La Campana, El Mefistófeles, El Padre Cobos, José Peluca, El Padre Padilla, El Ferrocarrílito y Dióíenes. Casi nada. Un perfil le bastaba a se lápiz para trazar el epigrama que hacía reír a carcajadas. También sus cuadros serios merecieron premio dc la