Teoría y práctica del diseño urbano para la reflexión de la ciudad contemporánea
70 Teoría y Práctica del Diseño Urbano san como trazas que dibujan las líneas de nivel, arrastrando piedras, arena y barro. Sus eventos episódicos de crecida, ave- nidas violentas y rebalses, causados por el aumento de los flujos promovidos por fenómenos meteorológicos, a su vez se manifiestan como la creación de nuevas cañadas eventuales. La Alameda de Santiago de Chile tiene su origen en épocas anteriores a la colonización indígena y española, como una explanada de inundación del río Mapocho, que en los tiem- pos coloniales constituyó la frontera u orilla sur del primitivo núcleo urbano. De norte a sur, estos valles transversales interiores se sitúan entre los cursos de los ríos Aconcagua y Mataquito -Quinta y Séptima Región, respectivamente- denotando entre uno y otro una reducción gradual del número y del rango de los núcleos urbanos. Son cuatro valles interiores que cubren una longitud cercana a los 260 kilómetros entre ambos extremos, cada uno de ellos con una propia fisonomía geográfica y una particu- lar configuración morfológica, atendiendo a sus actividades productivas y patrones de ocupación 14 . La ajustada anchura física de estos valles interiores -cercana a los 5 kilómetros- transforma las orillas surgidas de la ocupación productiva, en elementos gravitantes sobre las ocupaciones del suelo comple- mentarias a los usos agrícolas. A partir de ello, la orilla devie- ne en una franja ocupada por vivienda y bodegas -que los in- gleses denominan fringe of settlemen t- dando gradualmente paso a tejidos que profundizan hacia el interior de los predios ocupaciones de usos agrícolas. En los casos que estas ocupa- ciones observan otros usos, su presencia no entra en pugna con las actividades agrícolas del suelo, porque sus desarrollos se producen en zonas de baja productividad o de complicada explotación, tales como terrenos en pendientes y pedregales. En las ciudades, las orillas son, expresan y se entienden como límites surgidos naturalmente como una consecuencia de la ocupación del suelo de usos urbanos. Siempre ha sido así, hasta que el crecimiento acelerado de los tiempos modernos introdujo otras variables que hicieron de ella un área difusa y fragmentada, hoy de difícil lectura. En las áreas rurales, la orilla producto de las trazas hídricas de canales y acequias, 14 Los valles considerados que guardan características geográficas similares, se extienden entre la Quinta y Séptima Región, por donde discurren los ríos Aconcagua, Maipo, Cachapoal, Tinguiririca y Mataquito.
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=