Silvicultura en bosques nativos: experiencias en silvicultura y restauración en Chile, Argentina y el oeste de Estados Unidos

236 — Silvicultura en bosques nativos ensayos entregan información para guiar activida- des similares de restauración en otros rodales y en otros tipos de bosques. En estos ensayos, los árboles fueron identificados para remoción por uno de los dos siguientes métodos: los árboles fueronmarcados con pintura, normalmente utilizada para designar su estado como árboles para la remoción o la reten- ción, o el operador está autorizado para seleccionar los árboles para su remoción. Para el primer méto- do, se requirió un ingeniero forestal experimentado que anticipara el desarrollo futuro del rodal y creara una estructura de rodal diversa que acentuara la di- versidad estructural a medida que se desarrollaba. Con el último método, los forestales también deben ser capaces de identificar árboles para remoción y crear una estructura de rodal diversa junto con eli- minar físicamente los árboles sin dañar los árboles residuales. En la costa norte de California, los osos negros ( Ursus americanus ) dañan coníferas jóvenes inclu- yendo la secuoya (Giusti 1990, Kimball et al . 1998, O’Hara et al . 2010). Los osos sacan la corteza para comer el cambium, especialmente en la primavera cuando las otras fuentes de comida son escasas (figu- ra 12.3). Los osos prefieren los árboles más vigorosos de los rodales jóvenes y algunos de los peores daños han sido asociados en rodales raleados (Kimball et al . 1998, O’Hara et al . 2010). Cuando los árboles son anillados, el fuste comúnmente muere, pero, en el caso de la secuoya, un árbol completamente anilla- do rebrotará de tocón normalmente (Giusti 1990; O’Hara et al . 2010). El excesivo daño provocado por osos puede disminuir la progresión sucesional para obtener características de bosques adultos por me- dio del retraso de la aparición de árboles grandes. En cualquier caso, diseñar rodales para aumen- tar la variabilidad involucra desarrollar reglas o di- rectrices para guiar decisiones sobre cuáles árboles a retener y cuáles a remover. Se han desarrollado y probado muchos métodos de RDV en los rodales de secuoya en la costa de California, los cuales van de procesos de marcación simples a muy complejos y, por ende, la facilidad de su aplicación también varía considerablemente. Protocolos de prescripcion de raleo de densidad variable Se han usado cuatro tipos distintos de protocolos como tratamientos de restauración en rodales jóve- nes de secuoya costeras (figura 12.4): 1) Grilla aleato- ria incluyendo densidad baja y moderada; 2) Regla Dx ; 3) Raleo a distancias incluyendo una variación de espaciamiento de 4,9 y 6,1 m; y 4) Liberación locali- zada. Los protocolos de grilla aleatoria fueron de- sarrollados para obtener espaciamientos variables. Los otros protocolos fueron tratamientos de raleos operacionales. También se implementaron raleos de espaciamiento y despeje localizado de vegetación en bloques para realizar un monitoreo a largo plazo. Estos protocolos son descritos más detalladamente en O’Hara et al . (2012). Grilla aleatoria . se elaboraron dos objetivos de densidad en prescripciones para el raleo en la cuen- ca Mill Creek de lo que ahora es el Parque Estatal De Secuoyas Costeras del Norte de California. Las plantaciones fueron establecidas en rodales cose- chados de secuoyas que habían sido plantados con plántulas de pino Oregón e incluían, entre otras es- pecies, secuoya originada de rebrotes de tocón. Al momento del raleo, las plantaciones tenían 12 a 14 años. Los sitios son productivos, y corresponden a planicies aluviales de pendiente moderada. Se ela- boraron dos objetivos de manejo de la densidad en los bosques tratados, en conjunto con el personal del parque estatal y la Liga Salven a las Secuoyas (ONG). Un protocolo de densidad descrito como “densidad baja” tenía como objetivo remover 125 ár- boles/ha, con una mortalidad permitida posible de 60 árboles/ha (185 árboles/ha). El segundo protocolo de densidad fue de aproximadamente 370 árboles/ ha (incluyendo la mortalidad permitida). Se le solicitó al marcador que visualizara un área igual al área promedio de árboles para las dos den- sidades posteriores al raleo (ver arriba), excluyendo la mortalidad permitida. Para el tratamiento de den- sidad baja, esa “celda” sería 1/125 ha o aproximada- mente 81 m 2 . Se generó un número aleatorio del 1 al 4 para representar el número de árboles residuales

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