Silvicultura en Bosques Nativos vol. 1

65 Manejo multietáneo en el centro-sur de Chile 4.5 Opciones de manejo multietáneo en bosques adultos y parcialmente degradados Bosques Siempreverdes . El tipo forestal siempreverde (TFS) es el de mayor superficie entre los 12 tipos forestales de Chile, con 4,15 de las 13,4 millones de hectáreas de bosques nativos en Chile (1,4 en áreas protegidas del Estado) (CONAF et al . 1999). El TFS es el más complejo en Chile, lo que se explica no sólo por su gran extensión y variedad de sitios en que crece, sino que también porque ocupa una importante superficie del país donde ocurre una transición de especies adaptadas a zonas mediterráneas y otras adaptadas a zonas más templadas y frías (Donoso 1981, Donoso 1993). La presencia de unas 21 especies arbóreas y varias decenas de otras especies vasculares (Donoso 1989, Donoso 1993, Aravena et al . 2002; Donoso y Nyland 2005) especialmente en bosques adultos multietáneos, y el hecho de que la mayoría de las especies arbóreas son de valor comercial (Donoso 1989, Díaz-Vaz et al . 2002), son factores que hacen que la silvicultura asociada a estos bosques sea más desafiante que aquella asociada a otros bosques de composición y estructura más simple en Chile. La enorme variación latitudinal y altitudinal en que se encuentra el tipo forestal siempreverde (Donoso 1989, Donoso 1993) indica que se trata de un conjunto de comunidades forestales muy diversas y que al darse recomendaciones o prescripciones, ellas deben ser referidas a rodales o condiciones relativamente específicas. Las diferencias asociadas con variaciones latitudinales y longitudinales (Andes vs. Costa) son fundamentales, ya que a ellas van asociadas importantes diferencias de sitio (Donoso 1989, Donoso et al . 1999). En segundo lugar es necesario identificar los bosques adultos más comunes en cada macrorregión donde crecen los bosques siempreverdes en la zona centro-sur de Chile, particularmente en cuanto a su rango de variación en ocupación de sitio, expresado por ejemplo en área basal. Considerando estas variaciones se debe usar una aproximación metodológica que permita evaluar al menos un par de alternativas de cortas de selección en cada bosque representativo de cada macrorregión. Los bosques siempreverdes de la cordillera de la Costa de Valdivia (40 °S) están dominados por tepa y ulmo, aunque a altitudes menores a 500 m s.n.m. olivillo es también una especie importante, incluyendo aquellos de la provincia de Osorno (41°S). Sobre los 500 m s.n.m. en esta región, mañío hembra es también una especie de mayor importancia (Donoso 2002, Donoso y Nyland 2005). Coihue común puede estar presente, pero es escaso hacia la ladera occidental de la cordillera de la Costa entre los 40 y 42 °S donde hay aún muchos bosques sin intervención antrópica y no existen perturbaciones de gran escala (Donoso 1989). En la ladera oriental en cambio es posible encontrar bosques con coihue común ocupando posiciones emergentes (Llancacura en figura 4 y cuadro 1). Hacia el sur se observa una disminución de

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