Malestar y destinos del malestar: políticas de la desdicha vol. 1

144 – malestar y destinos del malestar Políticas de la desdicha sujeto per vía di levare , con el fin de facultar el recuerdo de las lagunas de olvido. El resorte que tensa todo ese cuadro, antes que el recuerdo mismo, es la resistencia del analizante y del analista. En Recordar, repetir, reelaborar 5 , Freud nos indica que, en buena medida, el análisis se consuma en la durcharbeiten , es decir, en el trabajo de atravesamiento de la resistencia, al cual se arriba cada cierto “avance”. El sentido de este trabajo refiere a “[…] comprometerse, adentrarse profundamente en una tarea hasta atravesarla por completo” 6 , para luego trabajar sobre un material, como podría ser la elaboración de la sexualidad infantil reprimida, o lo que habrá que consumar pieza por pieza, tal como muestra de manera ejemplar el trabajo del duelo. Las dos formulaciones clásicas del horizonte del análisis consideran esto: “ Hacer consciente lo inconsciente”, así como en aquella última formulación en la 31ª conferencia La descomposición de la personalidad psíquica , en donde se indica “[…] ahí donde hay ello debe advenir el yo” 7 , tienen por condición ese pasaje a través de la resistencia, lo que dispondrá de otro modo al propio sujeto en su tarea de elaboración. Por decirlo así, hay un pliegue entre la elaboración sobre la forma del aparato y sobre el material (contenido) inscrito como huella, el cual debe ser considerado en el trabajo del aná- lisis. Es por esta misma razón que, en Análisis terminable interminable , Freud 8 dirá que el curso del análisis dependerá tanto de las condiciones de elaboración del suje- to, como de que el analista esté en condiciones de trabajar con su propia resistencia . Es por ello que no podemos desatender que lo traumático concierne, más que al acontecimiento mismo 9 , a aquello que deja interrumpido y, en las vivencias reales de lo traumático, a las consecuencias sobre las condiciones del aparato de elaboración y sobre la escucha; condiciones que dan cuenta de la superficie en donde se ligan los procesos primarios y secundarios de la vida anímica. Freud orienta esta tesis tal como sigue: La expresión “traumática” no tiene otro sentido que ese, el económico. La aplicamos a una vivencia que en un leve lapso provoca en la vida anímica un exceso tal en la intensidad del estímulo, que su tramitación o finiquitación { Aufarbeitung } por las 5 Sigmund Freud, “Recordar, repetir, reelaborar” en Obras Completas de Sigmund Freud , vol. 12 (1914; Buenos Aires: Amorrortu, 1991), 145-158. 6 Luis Hanns, Diccionario de términos alemanes de Freud (Buenos Aires: Lumen, 1997). 7 O, quizás, más precisamente: “allí donde ello es, yo debe advenir” [ Wo Es war, soll Ich werden ]. Sig- mund Freud, “31ª conferencia. La descomposición de la personalidad psíquica” en Obras Completas de Sigmund Freud , vol. 22 (1933[1932]; Buenos Aires: Amorrortu, 1991), 74. 8 Sigmund Freud, “Análisis terminable e interminable” en Obras Completas de Sigmund Freud , vol. 23 (1938; Buenos Aires: Amorrortu, 2010), 211-254. 9 El acontecimiento externo, real, objetivo, en último término ingresa en la trama de la subjetividad como vivencia. Por lo tanto, si bien no se puede desatender lo real, en este caso, importa leerlo desde sus efectos y desde las operaciones subjetivas para su tramitación. Me parece que así se lo puede dimensionar de manera singular como un acontecimiento real para un sujeto con nombre propio.

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