Cirugía en medicina general: manual de enfermedades quirúrgicas

39 Capítulo 2 / Conceptos Generales del Pre y Post-operatorio que la movilización precoz presenta beneficios. En grandes laparotomías o hernioplastias es útil colocar una faja elástica abdominal para deambular o sentarse y así disminuir el riesgo de complicaciones (Popa y cols., 2016). Ocasionalmente se indica posiciones puntuales, como por ejemplo, la posición Fowler en pacientes vasculares o el decúbito ventral en pacientes con complicaciones respiratorias complejas (Setten y cols., 2016). Hidratación La administración de soluciones por vía parenteral permite cubrir los requerimientos mínimos necesarios de líquido, electrolitos y glucosa mientras se recupera la función normal del tubo digestivo. También permite reponer las pérdidas excesivas de volemia ocasionadas por ciertas patologías o complicaciones (ej.: hemorragias, obstrucción intestinal). Es importante llevar un control de balance hídrico para detectar tempranamente complicaciones (ASA, 2013; Townsend y cols., 2009). Movilización precoz La movilización precoz del paciente disminuye los riesgos de desarrollar trombosis, neumonía, debilidad muscular, úlceras por presión, entre otros. La evidencia científica sobre estos beneficios es débil (Castelino y cols., 2016), sin embargo, los cirujanos recomiendan la movilización precoz dada su experiencia clínica. Es importante educar al paciente sobre estos beneficios, de esta manera estará más dispuesto a colaborar con el equipo de enfermería y kinesiología en este aspecto de la terapia. Idealmente el paciente debe poder sentarse en el borde de la cama a las 8 horas después de la cirugía. Si el paciente no se anima a realizar estas actividades por dolor o miedo, se puede sugerir cubrir la herida operato- ria con un cojín o la mano, tal de disminuir el dolor y aumentar la sensación de contención (Wojahn y Kaczkowski, 2009). Régimen La ingesta de alimentos se inicia cuando el paciente esté completamente despierto y lo solicite, o bien cuando haya recuperado el reflejo de arcada y tos. No hay contraindicacio- nes a la ingesta a menos que se trate de una intervención que afecte al sistema digestivo (Townsend y cols., 2009). El régimen indicado dependerá de las características del paciente y de la cirugía como se puede apreciar en la tabla 2-15 (UIV, 2017). Algunos autores plantean que indicar regímenes específicos no tiene sentido en algunos casos, ya que tienen poca adherencia y mal nutren al paciente, agravando las complicaciones del postoperatorio (ej.: náuseas, ìleo, cicatrización deficiente) (Sriram y cols., 2016). En caso de que el paciente requiera suplemento alimenticio o no pueda ingerir por la boca, se recomienda como primera opción la alimentación enteral y luego la parenteral (Seres y cols., 2009). Tabla 2-15. Tipos de régimen según características del paciente y de la cirugía Régimen cero Ayuno. Se utiliza cuando se quiere evitar la ingesta. Los nutrientes se pueden aportar por vía parenteral. Régimen hiposódico Alimentos con bajo contenido de sodio, pero rico en nutrientes esenciales. Se utiliza cuando se necesita restringir la sal ingerida. Ej.: Hipertensos. Régimen hipocalórico Alimentos con bajo contenido calórico, pero rico en nutrientes esenciales. Se utiliza cuando se necesita restringir las calorías ingeridas. Ej.: obesos. Régimen hipercalórico Alimentos con alto contenido calórico y rico en nutrientes esenciales. Se utiliza cuando se necesita aumentar las calorías ingeridas. Ej.: daño hepático. Régimen hipoglicémico Alimentos con bajo contenido de azúcares, pero rico en nutrientes esenciales. Se utiliza cuando se necesita controlar la glicemia, sobretodo posprandial. Ej.: diabéticos. Régimen hipoproteico Alimentos conbajo contenidodeproteínas, pero rico en nutrientes esenciales. Se utiliza cuando se necesita controlar la ingesta proteica. Ej.: insuficiencia renal. Régimen hiperproteico Alimentos con alto contenido de proteínas y rico en nutrientes esenciales. Se utiliza cuando se necesita aumentar la ingesta proteica. Ej.: gran quemado. Régimen hipolipídico Alimentos con bajo contenido de grasas, pero rico en nutrientes esenciales. Se utiliza cuando se necesita restringir la ingesta de lípidos. Ej.: dislipidemia. Régimen sin glúten Alimentos sin contenido de glúten. Se utiliza en pacientes alérgicos a esta proteína. Ej.: celíacos. Régimen sin residuos Alimentos bajos en fibra, lactosa y grasas. Se utiliza en pacientes para limpiar el colon. Ej.: previo a una cirugía de colon. Régimen líquido Alimentos líquidos como sopas. Se utiliza cuando el paciente está pasando de alimentación parenteral a oral, como una etapa inicial. Régimen semilíquido Alimentos pastosos como yogurt o jalea. Se utiliza cuando el paciente está pasando de alimentación parenteral a oral, como una etapa intermedia líquido y blando. Ej.: edentados. Régimen blando / liviano Alimentos blandos como fideos o pure. Se utiliza cuando el paciente está pasando de alimentación parenteral a oral, como una etapa intermedia entre semilíquido y normal. Régimen normal Alimentos comunes. Se utiliza cuando el paciente no tiene requerimientos espe- ciales.

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