Seguridad ciudadana en América Latina: miradas críticas a procesos institucionales
31 por negros ypobres”, enel casodel Brasil, loque también semanifiesta claramente en el sistema carcelario. Además, se coloca la necesidad de orientar las políticas basadas en estudios y no en consideraciones ideológicas, una característica que se puede observar con claridad 27 ya desde el gobierno de Cardoso y también en la formulación de los Planes de Seguridad Pública de los gobiernos de Lula da Silva. A continuación, la propuesta se ubica contra el modelo reactivo de seguridad vigente, a favor de una política con base en la prevención y en los modelos de policía comunitaria y orientada a la resolución de problemas, situando la exigencia de que se obtengan resultados en términos de “…reducciones significativas en las tasas de criminalidad y dehechos violentos 28 ”, considerandoque “…es perfectamenteposible alcanzar estos resultados. La experiencia internacional y algunos ejemplos en nuestro propio país lo demuestran suficientemente 29 ”. El fundamento se expone en los siguientes términos, que reproducimos in extenso por ser muy elocuentes.: “Para que estos principios puedan ser comprendidos en toda su extensión, hay que aclarar algunos conceptos. En primer lugar, cuando hablamos de “prevención”, es muy común en Brasil que se entienda como un sinónimo de “programas sociales” o de “ políticas públicas que aumenten la oferta de educación, salud, vivienda, ocio, etc. De esta manera, los gobiernos ya estarían haciendo prevención siempre que estuvieran realizando inversión en programas sociales. Esto no es, estrictamente, verdadero. Es evidente que las mejoras conseguidas en la situación económica y social de la población tienden a producir resultados positivos para la reducción de la delincuencia y la violencia. Pero la delincuencia y la violencia no pueden ser entendidas como resultado directo y exclusivo de la privación social. Reducir estas carencias puede ayudar mucho, pero esa no es, aún, la prevención de la que hablamos. De hecho, cuando nos imaginamos que la delincuencia y la violencia sólo se pueden enfrentar con reformas sociales, pasamos a despreciar la necesidad de una política de seguridad y es probable que de esa forma nunca la lleguemos a alcanzar. Por el contrario, creemos que es posible y necesario – más, es dramáticamente urgente – desarrollar políticas de seguridad que puede ofrecer resultados confiables y objetivos de reducción de los indicadores de la criminalidad, aunque – en contra de nuestra voluntad – la situación económica y social siga siendo muy injusta y desigual. “ 27 Dellasoppa, E. E. y Branco, Z. S. (2006). Brazil´s Public Security Plans. En, Bailey, J. y Dammert, L. (Coord). Public Security and Police Reform in the Americas (1 Ed. Pp.24-43). Pittsburgh, PA: University of Pittsburgh Press; Dellasoppa, E. E. ( 2002 b). Violência: Planos, oportunidades e o centro radical. Polêmica 5 (Maio-junho) Laboratório de Estudos Contemporâneos, UERJ. Recuperado el 17 de marzo de 2004 de http://www2. uerj.br/%7Elabore/violencia_dellasopa.htm 28 Brasil, Ministério da Justiça - Secretaria Nacional de Seguridad Pública - SENASP. Rede Nacional de Ensino a Distância.(2005 b). Guia para a Prevenção do Crime e da Violência nos Municípios. Recuperado el 22 de junio de 2009 de http://www. forumseguranca.org.br/referencias/guia-para-a-prevencao-do-crime-e-da-violencia-1 29 Ibid 4.7. El problema de la importación de filosofías Resulta claro que esta “situación social concreta’ en el caso de Brasil no coincide en absoluto con las realidades en las cuales se generan los fundamentos teóricos de las políticas que se pretende implementar a nivel descentralizado/municipal. En los casos americanos, se observa una orientación hacia los resultados en términos de relaciones con la comunidad, y en el caso italiano, donde se colocan explícitamente dudas racionales sobre la eficacia de la prevención situacional 30 , se privilegia claramente la prevención a partir de la organización y participación social. Particular énfasis se establece en torno a la inversión en la creación de diversos colectivos de ciudadanos que asumen múltiples actividades de prevención relacionadas con sus problemáticas específicas, en unmovimiento que se desarrolla a partir de la responsabilidad de los gobiernos locales, con características de una grassroots policy para las regiones. La “convicción del potencial papel de las municipalidades” está asociada a una concepción de la prevención en red diferente de la levantada por el modelo teórico de la prevención adoptada en el caso italiano. Aquí, “la imagen que se tiene a continuación ya no es más la de la “ciudad fortificada”, sino la de la sociedad civil que se convierte en una “red”, en la cual los flujos de información circulan con rapidez y en la que nada escapa. La referencia fundamental es, por lo tanto, el concepto amenudo ambiguo de comunidad, como un conjunto de personas que comparten una misma situación, y también los mismos intereses o valores” 31 . En cambio, en el caso brasileño se postula que la “…política de seguridad debe involucrar a otras agencias, públicas y privadas, capaces de desenvolver y apoyar políticas de prevención. Así, es necesario involucrar a las policías y a muchas otras instituciones en un trabajo racional… un trabajo donde, al mismo tiempo, las comunidades pasen a desempeñar un verdadero protagonismo” 32 . Como se puede observar, en este caso la “ambigua noción de comunidad” se refiere exclusivamente a instituciones, en el caso público, y a la “sociedad civil organizada” en el caso privado: o sea, se mantienen las condiciones para la continuidad de las influencias corporativistas y se promueve el espacio para que los grupos políticamente organizados puedan ejercer su influencia mediante la actuación dirigida a articular y organizar poder político negociable. Este problema fue explícitamente reconocido por el Ministerio de Justicia, cuando en su Texto Base para la 1ª CONSEG – Primera Conferencia Nacional de Seguridad Pública –, afirma, desarrollando sus argumentos sobre el Eje 1 (“Gestión Democrática, Control Social y Externo, Integración y Federalismo”) : “Es necesario, mientras tanto, ampliar, reglamentar y dar estructura a los Consejos Comunitarios de Seguridad, con el objetivo de garantizar su institucionalidad y metodología de funcionamiento, para evitar 30 Quaderni di Citta Sicure. (1995) Il progetto, i riferimenti, le attività. Tesi di Fondo per una Politica della Sicurezza della Regione Emilia-Romagna. Presidenza della Regione Emilia Romagna. Año 1, No. 3. 31 Ibid, traducción del autor 32 Brasil, Ministério da Justiça - Secretaria Nacional de Seguridad Pública - SENASP. Rede Nacional de Ensino a Distância. (2005 b). Guia para a Prevenção do Crime e da Violência nos Municípios . Recuperado el 22 de junio de 2009 de http://www. forumseguranca.org.br/referencias/guia-para-a-prevencao-do-crime-e-da-violencia-1
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