Sentimientos vencidos : comedia en tres actos

66 SENTDUENTOS VENCIDOS conformaría. :V!atilclita entonces a renunciar al paseo y lujo~ . ALBERTO . No es exigente; además el cariño puede tanto ... Todo lo espero de él. SOFÍA. Con1prondes poco a las n1uj~es . La 1nayoria somos ilusas y creemos encon– trar el paraiso al casarnos. Acabas de de– cir que el caríiio puede tanto, yo apelo a ese n1 isrno cat'i no para q ne olvides a Mc:1.– tildila. De él sacarás Jas fuerzas necesarias para vencerlo y tendrás Yalor. ALBERTO. No me pidas imposibles, rnadre. SoFIA. Ahora está lejos ... Déjala que sea feli7 con otro. La ausencia es buena consejera y ella elegirá otro a gusto de sus padres. ALBERTO. Tampoco lo consentiré ... 1'1atilde de otro .. . jarnás ... Tns razones no n10 con– venc0n, madre . He querido y quiero tanlo a 11atilde, que no puedo arrancar este ca– riño inceustado en el fonrlo de 1ni alma. So FÍA. Con fía en Dios y en el tien1 po: ellos to– do lo pueden. Entre los dos buscaren1os distracciones aparentes a lu n1al y te ali– viarás. Tn n1adre que tiene experiencia y es todo corazón es quien te aconseja. En el mundo existen grnncles consuelos para las grandes pena!=-. Para ti yo quisiera una ni– fía de rnás experiencia y que a la vez tu– viera una holgada situación económica. Los sentimicntosde 1Iatilde, por lo que han dicho Zenobia y Ülilia. d~jan qne desear. ALBERTO. Lo que digan ellas no Elebe preocu– parte. Tú mejor que yo subes que existen envidias. rivalidades, intereses propios entre las mujeres. Aden1ái:::, corno yo gusté un tiempo de Otilia: se vengan de esa 1nanera.