Sentimientos vencidos : comedia en tres actos

1 ·l.1 .J ·r- t t. ) ':' J j ,, .. . . ,J ,. .. .. •,; ,r ·l ,: .. f, i! . , . ' ' ,: .,. ... "'- .. ,: ·~;,. ,r ~) ,. :: .. , · ,• • \, ...... ......... SENT[MIENTOS VEXCIDOS ha hecho a,nar la Yida ... ¡sin él no qu1eeo nada! MARIO. IIay n1uchos modios de amar la vida , Al berto . La gran ciencia consiste en no afiigirsc por las contrariedades y en hacer frente a ella. SoFIA. Si, hijo, resígnate ... y olvida a Matilde, que cnGont1·arás otra mejor. ESCE~A 8.a. SOFÍA, ALBERTO, MARIO SrRvIE);TE (Entrando). Visitas, visitas, sofíora. ALBERTO. Era lo que faltaba ... De hnmor para ello estarnos ... me voy al dormitorio ... no quiero ver a nadie. lMAnro. Yo te acompaiío. mientras descansas. SoFÍA. E::-o es Mario ... no lo deje solo (A ta sir- viente). ¡Que pasen! (Sale). . ESCENA 9.°' Entran: SEÑORA ZENOBrA, OTrLIA y LAURA -SIRVIENTE. ( Oon un gran paquete que pone so– bre el escritorio). Entren no n1ás, aquí está la seíiora . -SOFÍA. ( Yendo al encuentro). ¡Qué milagro! (Abrazando a Zenobia). (Dando una signi– ficativa mirada al paquete) . (a Otilia) ¡Qué elegante y buena moza vienes! ... Eres una nota primaveral. .. (A Laura): Laurita, hiji– ta! ¿~cómo estás·t .. Sióntense. (Siéntanse). ZENODIA. Hemos venido por un rato a saludarte y a saber muy ospecialn1ente del enfermo.

RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=