Cuadernos de Beauchef: ciencia, tecnología y cultura volumen II

10 En “Breve mirada a la formación humanista del MIT. Entrevista al profesor Agustín Rayo”, Benjamín Armijo Galdames construye a la iniciativa de los autores citados en el párrafo anterior, preguntándose ¿cómo incide una formación integral en el desarrollo profesional del ingeniero? Su convic- ción es que una adecuada formación integral permite educar profesionales capaces de comprender las implicancias éticas de su desarrollo profesional, conocer el contexto histórico, social, político y cultural de los desafíos que debe abordar, para así analizar críticamente los problemas y necesidades del medio en el que se encuentra inmerso, y realizar propuestas coherentes con lo anterior; no como un individuo que labore solo, sino como un profe- sional colaborador, con habilidades sociales y capacidad para integrarse en equipos de trabajo multidisciplinarios y comunicar efectivamente sus ideas. Sus proposiciones las complementa, en coincidencia con sus opiniones, con una entrevista breve al profesor de filosofía Agustín Rayo, del Massachu- setts Institute of Technology, MIT. En el último apartado de artículos, acerca de la relación entre cien- cia, tecnología y creatividad, Danisa Peric en “Las manos que piensan. Re- flexiones en torno al pensar y hacer en conjunto”, examina las posiblidades de usar creativamente la ciencia y la tecnología hacia la innovación centra- da en el ser humano. Para ello analiza el trabajo que, en todo el mundo, realizan las plataformas FabLab, un modelo de laboratorio que provee libre acceso a conocimientos y herramientas para hacer (casi) cualquier cosa. Este proyecto, que busca un futuro sostenible, propone que cada nodo de fabricación sea un FabLab, y que estos nodos, trabajando en red, generen un ecosistema de producción e innovación distribuida —mediante manu- factura avanzada, redes energéticas e infraestructura inteligente— y una educación basada en el “aprender haciendo”. Afirma que cuando el pro- yecto involucra a grupos humanos debe ser abordado de manera transdis- ciplinaria, y la dimensión ética debe aflorar en cada uno de los integrantes, independiente del rol que juegue cada uno. Daniel Cruz contribuye con “Bucle y fantasma”, artículo en el que vincula Arte, Ciencia y Tecnología, porque, afirma, desde diversos lugares resuenan las agencias del diálogo entre ellos, de posibles cruces e interac- ciones que fusionan modelos de pensamiento, los cuales, en algunas oca- siones, provocan acercamientos tangibles que delatan proximidades de interés. Para singularizar este asunto propone un acercamiento a los con-