Cuadernos de Beauchef: ciencia, tecnología y cultura volumen II

80 Cuadernos de Beauchef transnacionales, ha aportado inversiones en el circuito productivo del etanol brasileño, sobre todo como consecuencia de los recursos natura- les, tales como suelo y agua, así como en virtud del parque agroindus- trial ampliamente moderno y tecnológico para la producción de etanol de primera generación. Pero los agrocombustibles que involucran altas tecnologías se desarrollan en los Estados Unidos. En 2011, la Dutsh Royal-Shell se asoció al mayor grupo nacional —la Cosan— a través de una joint venture , de la cual originó a Raízen. Shell adquirió el 50% del control de Cosan. Actualmente, Raízen es la tercera mayor distribuidora de combustibles en Brasil, detrás solamente de la BR (Petrobrás) y del Grupo Ultra. Petrobrás, en una señal tardía, comenzó a adquirir el control sobre algunas usinas de azúcar y alcohol. No obstante, al notar el proceso de internacionalización del circuito pro- ductivo del etanol brasileño, en 2010 Petrobrás Biocombustibles (subsi- diaria de Petrobrás para el sector de etanol y biodiesel) adquirió el 45% de la Azúcar Guaraní (siete unidades de producción de azúcar y etanol), también controlada por la francesa Tereos. En 2013, la adquisición de la Usina Mandu por Petrobrás convirtió a la estatal brasileña en la cuarta mayor empresa de etanol de Brasil, lo que demuestra el proceso de con- centración en ese circuito productivo. Otro hecho que conviene subrayar es que el área plantada con caña de azúcar en 2011/2012 fue de 9,6 millones de hectáreas, según datos del IBGE. Entre 1990 y 2011 el área plantada con caña en Brasil creció casi cinco veces, saltando de 4,3 millones de hectáreas (1990) a 10,2 millones de hectáreas (2013). No casualmente la extensión del área plantada con caña en 2013 impresiona. El Estado de São Paulo práctica- mente fue ocupado con aquella cultura. Además, la caña se expandió fuertemente hacia el suroeste de Goiás, sureste de Mato Grosso do Sul y Noroeste de Paraná. La Zona de la Mata Nordestina sigue también como tradicional zona cañaveral (Hira y Oliveira, 2009; Masieiro, 2011; Andra- de de Sá et al., 2013; Bernardes, 2015). Por lo tanto, el proceso de internacionalización del circuito pro- ductivo del etanol, el debilitamiento del Estado, la mercantilización de

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