Cuadernos de Beauchef: ciencia, tecnología y cultura volumen II

74 Cuadernos de Beauchef Desestatización e internacionalización del circuito productivo del eta- nol brasileño Entre los años 1990 y 2000, los países de América Latina, es- pecialmente Brasil, se vieron afectados por la crisis de la deuda. En el transcurso de ese período, lo que se observó, además de la grave crisis económica, fue la pérdida de la capacidad de inversión del Estado brasi- leño en los segmentos considerados “estratégicos” (energía, transporte, logística, etc.). El Programa Nacional de Desestatización buscó acelerar la re- tirada del Estado brasileño de las actividades productivas. Los pilares del Estado “empresarial”, poco a poco, fueron siendo deconstruidos. La Ley Nº 9.491 estableció el ordenamiento jurídico para dirigir el proce- so de desestatización o privatización de empresas públicas brasileñas. Además, la referida Ley hizo posible, en las subastas promovidas por el gobierno, la adquisición de las empresas públicas nacionales por el capital extranjero. Por lo tanto, se puede afirmar que la ley 9.491 (1997) reglamentó, en Brasil, los presupuestos del Consenso de Washington, cuyo propósito era liberar las actividades económicas de las amarras del Estado. Con el establecimiento de un ordenamiento jurídico que pasó a favorecer las inversiones extranjeras, lo que puede observarse des- de 2000, en relación con el circuito productivo del etanol brasileño, es su creciente internacionalización. Pero no es sólo la liberalización eco- nómica lo que explica esta dinámica. Es necesario tener en cuenta los acontecimientos relacionados con el cambio climático (el calentamiento global) y, por consiguiente, la carrera global por nuevas fuentes de ener- gía alternativas a los combustibles fósiles (Hira y Oliveira, 2009; Freitas, 2013; Andrade de Sá et al ., 2013; Ribeiro et al ., 2015). En 1997, con la entrada en vigor del Protocolo de Kioto, los países del Anexo I (naciones ricas e industrializadas) que ratificaron el acuerdo comenzaron a adecuar sus matrices energéticas para hacerlas menos contaminantes, aunque los combustibles fósiles siguen respon-

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