Cuadernos de Beauchef: ciencia, tecnología y cultura volumen II
47 Ciencia, Tecnología y Cultura Gabriela nos guía a empezar por un pacto personal, una obli- gación con nuestra alma, y luego seguir por los gremios profesionales, desde los que se puede tener mayor influencia en la sociedad. Cuando hay actividades que necesitan de regulación para cuidar la salud de los ecosistemas —humanidad incluida—, cuando queremos lograr apoyo decidido a formas de producción y de vida que podemos ayudar a cons- truir, los gremios pueden tener una voz. “Cada profesión es de hecho un linaje”, nos dice. ¿Cuál es nues- tro linaje, cuáles nuestros ancestros? La conciencia del cuidado de los linajes intelectuales, que obligan a partir del mérito cumplido, no está igualmente desarrollada en todas las especialidades. Descubrirla ayuda a la identificación, la pertenencia y la fuerza para la acción que influya en la sociedad. Dice Gabriela, al inicio de su discurso, que no le apetece olvidar su condición de mujer cuando alaba a los recién graduados por su logro. Me cobijo en ella y repito sus palabras: Pero esta alabadora tiene el derecho de dar algunas veces a su alabanza el sabor agridulce de la crítica y de la imposición de obligaciones, porque también ella nació como una guardiana de la vida y como una socia natural de todos los negocios vitales. (Mistral, 1979 [1931], p. 17) Así, alabo los logros y posibilidades de las ingenieras y los inge- nieros chilenos y llamo la atención sobre sus obligaciones para la acción climática. El privilegio de la carrera debiera ser honrado con un trabajo que tenga sentido. Es cierto que el sentido es algo personal y una deci- sión que debiera ser respetada; no obstante, las decisiones de quienes integran un linaje afectan a ese linaje y a la honra de la profesión que los une. Tomo ejemplos que ha citado, más de una vez, la ecofeminista Yayo Herrero (2013): fabricar bombas de racimo y producir alimentos se cuenta en el Producto Interno Bruto de igual manera, y vender ar- mamentos se contabiliza como riqueza lo mismo que descontaminar un río. Por más duro que resulte decirlo, hay trabajos que son socialmente
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