El público del teatro independiente

paces de atraer y satisfacer a una pluralidad de su jetos sociales. Por otra parte, aquel público más orgánico no es ne cesariamente "cerrado", en actitud de excluir todas aquellas manifestaciones que no lo identifiquen en sus aspiraciones contingentes. Su preferencia por este movimiento teatral no lo hace desvalorizar otro tipo de obras y opciones que poseen una dimensión in­ dagatoria de problemáticas más generales, como es el llamado teatro de "valoreo universales". Aquéllos teatros que parecieran tener un público so­ cial o ideológicamente más excluyente pueden haber estado afectados por condiciones circunstanciales que hacen no atribüible necesariamente a su opción tea - tral este hecho. Así por ejemplo, en la medida que el Teatro La Vocina era una compañía nueva, que pre­ sentaba una obra nueva en una sala que se inaugura­ ba para el teatro, y que no contaba con los recursos económicos ni el prestigio adquirido como para tener un respaldo publicitario o informativo importante, e ra esperadle que su primer público ( el captado en la encuesta, a tres semanas del estreno), fuese el más cercano, el más interesado y más informado acerca de estos eventos a través de circuitos altamente orgáni eos a sus emisores. Probablemente, transcurrido al­ gún tiempo, se pueda"correr la voz" en círculos cada vez más amplios. Igual cosa puede ocurrir con el Teatro La Feria, por ejemplo. Para llegar a Lo Barnechea en: una tarde de invierno ( en ocasión de una encuesta, con lluvia) se requiere probablemente no sólo vivir én el barrio al­ to. sino tener una muy bita. 1motivación, claramente di­ rigida, que permita sobrepasar las dificultades de ac: céso planteadas.

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