Desvelos en el alba
Concluyo de leer este vo– lumen que el amigo Gon'ZJález Vera ha reco– pilado de entre el fárrago de mis papeles iné– ditos. Los más nacieron sin ánimo de publi– cación. Fueron, en verdad, elucubraciones fu– gitivas, momentos de desvelos, en el alba , cuando el sueño huye y, en la azulada y fría luz del amanecer, procedemos a un examen de conciencia. Su valor no es artístico, es de palpitación humana. Cada uno tuvo, en el momento en que fué escrito, calor de sangre, ) 25 (
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