La Quinta Normal i sus establecimientos agronómicos y científicos : paseo de estudio

-72- que debían comprender las observaciones, solamente cua- . tro fueron perdidas, i durante otras dos, una Tijera niebla oscureció la mui pequeña estrella que servía de estrella de comparacion». Terminadaf=i estas observaciones, conti– nuó otra série sobre las estaciones del planeta Venus. Sobre este planeta Gillis había ya escrito en diciembre de 1847 al sabio profesor Peirce: «Si mis observaciones debiesen comprender las estaciones de Venus en diciem– bre de 1850 i enero de 1851, como lo juzgan necesario muchos astrónomos, podría ·utilizarse. la oposicion inter– mediaria de Marte con mas probabilidades de éxito que la que ella tuvo anteriormente en el Cabo; seria entónces la estacion de verano en el hemisferio austral, i podríamos obtener una paralaje en ascension recta tanto como ·en declinacion>>. En 1850, haciendo uso del instrumento meridiano ya instalado, terminó la primera · série de observaciones so– 'bre el planeta Marte, i comenzó observaciones de zonas del grado 85 de declinacion austral. A este propósito dice M¡. Gillis: «Si a éstas se agre– gan las observaciones del nivel, 4el punto nadir de la colimacion ·sobre las estrellas fundamentales ántes i des– pues de cada zona, se comprenderá que los obsen ctdores estuviesen siempre ocupados durante cinco o seis horas, i aun mas muchas veces. Entre el 4 de febrero i el 21 de abril, sobre·76 noches, solo hubo cuatro oscuras)). De junio a octubre de 1850 con1enzó Gillis la série de observaciones de Venus. Entre el 16 d!3 diciembre de 1851 i 15 de m~rzo de 1852 emprendió la segunda sé– ríe de observaciones de Marte. A propósito de esta série ·dice Gillis: «La atmósfera está tan firme ·como la tierra misma, i · tan translúcida, que no solamente se ve dis– tintamente el compañero de la estrella de coinparacion (12.a magnitu'd), bajo de una completa iluminacion, si-

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