La Quinta Normal i sus establecimientos agronómicos y científicos : paseo de estudio
-57- ~un cuando este cuadro no comprende los objetos que dan luz sobre la edad, de la tierra, él traza con precision la línea i plan que debe seguir un museo en la eleccion de los objetos que revelan la existencia inicial del hombre i las huellas de su mas antigua civilizacion. El nuestro ha realizado este plan, en lo que respecta al hombre, i ha co– leccionado, ade~as, objetos que ponen de manifies~o la ed.ad misma de la tier;ra. P~ra nosotros los humanos, la historia natural debe tener por punto céntrico al hombre, i si el jeólogo indaga la formacion del planeta i las capas o creaciones que marcan los diferentes períodos de su de– sarrollo, es porque le interesa descubrir en cuál de esas capas o creaciones se en<l!uentran huellas de la existencia del hombre. Nuestro Museo hatenido en vista, al colec– cionar sus objetos, este doble propósito: dar luz a la vez sobre la edad del planeta i sobre la fecha inicial de la aparicion del hombre sobre la tierra. Veamos cómo ha rea- ' . lizado este doble propósito. II Animales anteriores á la creacion del hombre En cuanto a los animales de una creacion anterior a la del hombre, existen en el Museo, en una sala del pi– so bajo, el cráneo, reproducido: en. yeso, del E,lejhas ya– nesa, orijinario del Indostan; el Mammouth, abundantí– simo en Siberia; tan solamente las masas 'de los colmillos de estos animales han formado grandes islas en el Océano glacial, segun Figuer i Zimmerman. ·Se encuentran taro– bien allí el gran Cierrvo de Irlanda, del que existe igual- . mente el cráneo modelado en yeso, i el Mastodonte. «Era abundante en Chile, nos decia el Dr. Philippi, una de las varias especies del mastodonte, exactamente tan alta 8
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=