La Quinta Normal i sus establecimientos agronómicos y científicos : paseo de estudio
-29- pues, radicar i esplotar en Chile esta nueva industria i ha– cer de la seda vejetal, cultivada, tascada i elaborada entre · nosotros un artículo valioso de esportacion, hoi sobre todo, que la balanza comercial nos es desfavorable i que dificulta el intercambio comercial por falta de industrias que den productos aceptables en Europa para el pago de nuestras importaciones. Chile tendría gloria i gran provecho en un porvenir cercano, si mediante los cultivos i ensayos ha– bidos en su suelo, se llegase a plantear esa fábrica de seda vejetal. Hacemos votos ardientes porque asi suceda. VI ' · El Tecoma, planta que alimenta un criador de seda A este propósito, llamamos la atencion del director de este Campo de estttdio a la conveniencia de ensayar i acli– matar en Chile otra planta particular, el Tecomc~ side Eoxylttm; especie de jazmín, oriundo de la América cen– tral, que alimenta en sus ramas una nueva especie de gu– sano de. seda. Pasando por las boscosas cordilleras que atraviesan la República de San Salvador, dice un diario español, el Dr. Guzman descubrió i cojió en 1880 muchos capullos o sacos que pendían de aquella planta. Este ori- .jinal capullo llamó en tan alto grado la atencion del Go– bierno de esa República, que proporcionó al descubridor los aparatos necesarios para el desovillado de la seda) aparatos que hoi funcionan satisfactoriamente. El capullo es de 35 a 70 centímetros de largo, i aJgunos miden dos piés. Un insecto trabaja este capullo o saco hilando den– tro de él una seda cuyas .fibras, obser.vadas con el micros– copio, aparecen cilíndricas, translúcidas i semejan a los mas hermosos Tttssaks de la India. La seda es blanca i
Made with FlippingBook
RkJQdWJsaXNoZXIy Mzc3MTg=