La Quinta Normal i sus establecimientos agronómicos y científicos : paseo de estudio

-154- mía, ya descubriendo i catalogando nuevos astros, ya cal– culando sus paralajes para medir sus distancias ya :fijan– do sus situaciones respecto de la tierra para determinar sus posiciones absolutas i conocer la estuctura del U niver– so; rogamos, en una palabra, al Dr. Marcuse que, como lo hizo el Dr. Moesta, trace su programa, i lo realice con la ciencia i el ardor con que el sabio americano, Dr. Gould, rea1izó el suyo en el Observatorio Nacional de Córdoba (1 ). Tenga muí present~ el Dr. Marcuse que los astrónomos elevados a cierta altura son vistos i observados, como las constel~ciones, desde todcs los observatorios de la tierra, por mas apartada que sea la rejion donde se encuentren, i esperamos que, al reves de lo que sucede con la estrella nueva 1·ojiza, que, recien aparecida en el grupo de Orion, se. la contempla ya en su d~cadencia, se le vea a él, i con él a nuestro Observatorio Nacional, crecer en brillo i mag– nitud para gloria 'de Chile. CAPÍTULO VI MISION DE LOS OBSERVATORIOS DEL HEMISFERIO AUSTRAL ESPLORAOION DEL CIELO AUSTRAL • I Descubrimíento de un nuevo mundo i de un nuevo cielo Para completa! la conviccioh de nuestros hombres pú– blicos sobre la necesidad de dotar ampliamente nuestro ' . (1' A este efecto hemos invitad_o al señor ~aren¡;~ para que se sir~a trazamos el programa d.e sus trab:;tJOS futuros, 1 ha temdo la complacencia ~e r.res~ntarnos el brillant~ programa que se encuentra entre las notas 1lustratlvas, nota 7. 11 al fin del vohímen. .

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