La Quinta Normal i sus establecimientos agronómicos y científicos : paseo de estudio
-105- para que a la par con el de Windsor, en Australia, las practicase. I es tal la importancia .que las grandes nacio– nes atribuyen a esa indagacion, que en 1884, el .Observa– torio de Santiago ha recibido una invitacion oficial de un Comité autorizado por el Gobierno Imperial de Alemania secundando el pedido de la Conferencia de Roma para que, a la par con el Observatorio de Windsor en Australia, se ocupase en esas investigaciones. Para hacer tales estudios oportunamente se necesita un Instrumento de. Pasaje de primera fuerza i por fortuna este .instrumento, aunque desarmado i oxidado en parte por igual causa que el MERIDIANO, existe en nuestro Obser– vatorio. • El Dr. Marcus~ aprecia en alto grado este instrumento i así nos decía, «sí, como el MERIDIANo, se armase aquí i se remitiese a Eichens, su fabricante, ese instr~mento, una vez reparado en París, quedaría de primer órden.)) N os observaba asimismo el Dr. Marcuse que la sala del primer vertical 7 llamada así porque está orientada del oeste al este, que fué construida seguramente para un instrumen– to mucho mas pequeño, queda estrecha para el gran ins– trumento de pasajes que debe instalarse. Es pues indis– pensable dar a esGa sala las m~s vastas proporciones que exije el instrumento que va a ocuparla. Convendría en– .tónces que, como lo dijimos, respecto al Círculo Meridiano, se la reconstruyese bajo la misma forma i condiciones que la sala meridiana en el tiempo del viaje de reparacion que debe hacer el instrumento a Europa. V El gran Ecuatorial Examinemos ahora el objeto i el estado del G1·an Ecuatorial. 14
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