Sujeto social y proyecto histórico en la dramaturgia chilena actual

El desarrollo dramático converge, entonces, hacia la integra­ ción de los dueños de casa a este nuevo espíritu de trabajo. Las sirvientas de años de lealtad partieron cantando a unirse sin siquiera despedirse de la patrona. Ni la hija ni la madre acceden primero a incorporarse, aunque les dan un plazo fatal. El padre sigue aún con la esperanza de establecer un acuerdo ne gociado que le permita mantenerlo todo. El hijo Bo'oby se ha plegado con entusiasmo, aún cuando no logra comprender la racio nalidad profunda del movimiento.. Bobby : Estoy feliz .de poder trabajar por ustedes... Estoy aprendiendo. China : Nadie trabaja para nadieoahora, hijo..-Traba­ jas para tí mismo, porqué- tú mismo somos todos. Finalmente, la esposa y la hija, impulsadas por una fuerza in­ terna desconocida,.: reconocen su derrota y prefieren buscar e n ­ tre ellos un lugar. Meyer, solo y ya casi en un desvarío, prosigue su discusión con China, insistiendo que todo es una venganza personal c o n ­ tra él, y que el movimiento que se ha generado no tendrá capa­ cidad de proyectarse en la historia porque han destruido cosas valiosas, entre otras la belleza. Finalmente, desfila una ga­ lería de personajes ruinosos y maltrechos; fantasmales, que cuentan su tragedia de muerte, usurpación o abandono en manos de Meyer, quién finalmente reconoce sus crimines ante China a quién identifica con el hermano vengador de su socio asesina­ do . La resolución final de la obra es altamente significativa, Me­ yer despierta agitado de una pesadilla: ha soñado todo lo an­ terior, han sido sus fantasmas y sucia conciencia los que han aflorado.' Pero el sueño también ha de hacerse carne en la rea lidad en la medida que, estando ya despiertos, descubren que u no de los sucesos soñados fue auténtico, corroborado por una quebrazón de vidrios en el living. Este es seguido de una ma­ no harapienta que abre el picaporte. Es decir, se está en un tal momento histórico que los temores de la burguesía de enfren tar una revolución social están no sólo cercanos, sino ya mate ri al i z á n d o s e .