Casas patronales : conjuntos arquitectónicos rurales

leamiento, que los habitantes encuentran en los corre– dores, cuando lo desean. El equipamiento aun en las haciendas más importantes era extremadamente sencillo, sin mayores preten– siones estilísticas, y su condición principal era la soli– dez, por cuanto de no ser así, el esfuerzo para transpor– tarlo e instalarlo podía destruirlo. En cada dormitorio se instalaban camas, veladores, roperos, sillas y la infal– table cómoda con una mesa adicional para los elemen– tos de aseo personal. El recinto mejor situado y equipado era el comedor, "no estará de más decir que la mesa se encontraba co– locada entre dos puertas y varias ventanas abiertas; el aire circulaba libremente entre los higos secos i las ho– jas de parra tendidos en el suelo trayéndonos agra– dables perfumes . Magníficos nogales nos defendían de los ardientes resplandores del sol". (1 ). "La mesa estaba puesta a la española, con cubiertos para dieciséis personas y rodeada de sendas sillas de alto respaldo. Nos sentamos a comer como a las tres; don Ambrosio a la cabecera, su esposa a su izquierda y yo a su derecha, mientras que las trece niñas tomaron sus puestos según sus edades, con la menor de el las a los pies. El hijo no se hallaba presente ... La comida se s-irvió en vajillas de plata y se siguieron, uno tras otro, trece diferentes guisos, comenzando por la sopa y ter– minando con el asado". (2). Como reflejo de la madurez alcanzada por las activida– des de la Hacienda, la casa patronal va alcanzando to– do su significado como el motivo principal y dominan– te, lo que se acentúa frecuentemente a partir del siglo XIX, con la introducción de los miradores y de algunos torreones. Los miradores, cuerpos extraños a la técnica del adobe y de la teja, se construyen en madera, con el objeto de no recargar con un peso excesivo, los muros sobre los que se apoyan, y cumplen funciones de luga– res de observación desde los que se domina visual– mente todo el entorno de la Casa. Descartándose por su fragilidad material, una supuesta actitud defensiva. Ubicados invariablemente en el eje principal construc- (1) Hall , Basilio: "Via¡e a Chile , Perú y Mé xico ". Imp . Uni versita– ria, 1906. Tomo l. Pág. 103. (2) Ruschemberg, William S. W.: "Noticias de Chile " (1831 - 1832) . Edit. del pacífico . Santiago, 1956. Pág. 102. 40 El mirador, elemento relacionador visual con el e ntorno, que adopta su propia expresión formal. 82. Estructura y forma, Lo Arcaya. 83. Lo Arcaya, Puente Alto. 84. Quilapilún , Chacabuco . 85. El Principal, Puente Alto. 86. Apalta de lo Mendoza , Rengo . 87. El Principal. 88. Lo Arcaya. 89. Quilapilún. 90. Apalta de lo Mendoza. El mirador y su relación con la volumetría general . 91. Lo Arcaya. 92. Apalta de lo Mendoza. 93. Quilapilún . 94. El Principal.

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