Casas patronales : conjuntos arquitectónicos rurales

ridad, para comprender el sentido de conjunto ar– quitectónico de las Casas Patronales. A pesar de no existir ninguna igual a otra en cuanto a sus formas y di– mensiones, morfológicamente hay una relación en cuanto a la tendencia al cuadrado y al rectángulo. Las soluciones circulares o semicirculares, constituyen una excepción, confirmando así la falta de afinidad de nuestra arquitectura del pasado, con las tendencias es– paciales y formales del barroco. En los valles transversales y cordilleranos, la topografía no favorece las explanadas de ciertas dimensiones, ni el acceso frontal, y por tratarse de tierras de menor ca– pacidad productiva, las casas no adquieren el de– sarrollo y complejidad de las construidas a pie de cerro o en el plano, "las casas se erigen en el linde del valle, . junto al camino que conduce a San José de Maipo y al Paso de los Piuquenes . . ." (2) . El camino corre entonces paralelo al tapial, o al cierro vegetal exterior, y a pesar de lo anterior, se ensancha en forma perceptible frente a la casa principal. La explanada remata invariablemente en la vivienda del propietario (patrón), y el resto de su entorno lo con– forman las construcciones comunitarias y de servicio del conjunto (oficinas, pulpería y llaveríaL y las vivien– das de los empleados de más alto nivel, en especial la de los capatac.es . (1) Subercaseaux, Ramón : "Memorias de Ochenta Años". 2° Edi– ción. Editorial Nascimento, 1936. Pág. 43. (2) Mac Bride : Ob. citada, pág. 56. 22 16. San Migue/, Santa Cruz. 17. Mocholí, Rancagua. 18. El Principal, valle de Pirque. 19. Po/paico, val/e de Ti/ti/. 20. Lo Arcayo, valle de Pirque. 21. Flor del Llano, Talco . 22. San José del Carmen, Santa Cruz . 23. Quecheregua, Molino . 24. Piguchén, valle de Putaendo. 25. Lo Vicuña, val/e de Putoendo. 26. Apa/ta de lo Mendoza, Rengo. 27. Chacabuco, valle de Colino .