La producción de música popular en Chile

bilidad, a excepción del sello Alerce. Por ello se han abierto otros canales en los cuales poder entregar su raú sica. Y es por eso que realmente preocupa que en este espacio la música popular chilena la estemos viendo en un plan económico. Por otro lado, la gran mayoría de la gente, en los cientos de lugares que me ha tocado estar en este escaso año y medio que estoy de retorno en mí país, es otro el tipo de música que se escucha y no el tipo de música que se pueda comprar en las disquerías". El tema de la piratería aparece en su doble dimensión: de despojo económico, pero también de acceso a un bien sentido necesario y para el cual no se tiene poder ad­ quisitivo. Juan Pablo González precisa: "Se habló en un momento de una ley que pondría en fuga a los piratas de los cassettes, lo que produciría que una gran canti­ dad de personas que tienen la posibilidad de comprar una cassette a 150 pesos en la calle ahora tengan que pagar 500 pesos que corresponden a los negocios del ramo. Yo quiero hablar desde la perspectiva del que consume la mú sica. Hay una necesidad de la música. La música existe porque el hombre necesita de ella. Distintos tipos de música cumplen distintas funciones en el ser humano. Al gunos satisfacen su necesidad de bailar, otra satisface un problema emocional o expresivo, o la música clásica satisface una necesidad más bien mental, intelectual del ser humano. Frente a esa necesidad masiva de música, aparece ia cassette pirata satisfaciendo esa necesidad. Si se le niega a una gran masa de personas la posibili