La industria editorial y el libro en Chile (1930-1984) : (ensayo de interpretación de una crisis)

70' - La vertiente nacionalista autoritaria interpreta a los g r u ­ pos militares y civiles- mas directamente involucrados en el derrocamiento delgobierno anterior. Su eje es una concep - ción telúrico-metafísica del s e r ;chileno según la cual éste es visto como una esencia forjada en el entrecruzamiento, del hombre, con la naturaleza, esencia que estaría latente en to­ dos los habitantes del territorio nacional.(54). Desde esta concepción la cultura es percibida como m a ni fe s­ tación de esa esencia, como un todo ya constituido — y como tal invariable— que se revela y encarna en la idiosincra- cia chilena. .Esta visión niega el espacio cultural como cam po de conflicto y de coexistencia de visiones culturales di­ versas., puesto que' ello vulneraría la integridad del cuerpo social y el "alma del país". En la coyuntura de 1973, la ver tiente nacionalista tiende a rescatar las raíces de la chi- ' lenidad, de esa esencia nacional vulnerada que es necesario resucitar, y cuyas bases se encuentran en "illo tempore", en la Independencia, en la República Portaliana y en las gr an­ des gestas cívico-militares del pasado. Esta vertiente es la que mayor incidencia tiene en la Editora Gabriela Mistral durante los años que es presidida por el General(R) Diego Ba rros Ortiz (1973-76). Ella se patentiza en casi todos los aspectos de' la gestión, desde el emblema (una escarapela con los colores patrios) pasando por la morfología de las co le c­ ciones ("Ideario", "Pensamiento", "Septiembre", etc.) y los títulos escogidos, hasta el tipo de lector al que se apela (aquel que apoyó el 11 de septiembre y que ahora hay que in volucrar en la "reconstrucción del país"). Predominan, e n ­ tonces, aquellos títulos que revitalizan dimensiones paradig máticas del Alma Nacional (festividades patrias, Fuerzas A r ­ madas, costumbres y .paisajes tradicionales*, e t c .) . 0 aque- (54) Enrique Campos Menéndez en Pensamiento Nacionalista, op.cit. dice "para el nacio­ nalismo el chileno no es un hombre cualquiera, surgido en la probeta d é l a expe­ rimentación filosófica: se trata más bien de un ser diferenciado y condicionado que lleva en sí una esencia que fatalmente lo conduce a un destino determinado... Por e.llo el nacionalismo rechaza como falsos todos los ideologismos mesiánicos que basan sup milagros en los cambios de estructuras, atribuyéndoles a éstos valores mágicos capaces de modificar su propia naturaleza. La fuerza capaz de superar al chileno está dentro de sí mismo; por ello, el nacionalismo es la más realista de las concepciones, pues su política es aplicable, solamente a un ser conocido y de­ terminado: el chileno".

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