CENECA Distinciones (Cultura-Arte-Política-Filosfía)

39 fuerza a todo egoísmo "generacional" que so pretexto de no responsabilizarse de "errores cometidos por o­ tros" ahonda las heridas en vez de ayudar a cicatri­ zarlas. Asumir el pasado es hacerse cargo de él en toda su concreción, "comprendiendo" en el actual cometido la línea constante que ha ido creando lo na cional en todas las épocas. "Oponerse" a lo hecho du rante un determinado período es una vez más hacer pre valecer lo político sobre lo cultural y quedarse sin comprender la legalidad que hay en lo propio, que re viste formas diferentes según los períodos históricos aunque sin dejar de conservar su fidelidad a las de­ cisiones originarias que le dan a una cultura su ca­ rácter nacional. 69 La búsqueda de una síntesis entre política y cultura está dada ya como una tarea necesaria por los propios avatares de nuestra historia. Que ésto se haya dado de esta manera no es algo que dependa ni haya depen­ dido únicamente de las voluntades de nuestros creado res de chilenidad. Si Neruda es hoy para nosotros un destino ello se debe a múltiples factores que han i­ do dándole forma a nuestro mundo. Hay que tomar con­ ciencia de estos hechos y lanzarse a las tareas de nuestra propia construcción asumiendo en toda su pro fundidad nuestro pasado y nuestras tradiciones. Tal vez el próximo hito de esta evolución que, aunque 1i_ mitada, no deja de ser gloriosa, tenga ya otro nombre Matta, que es, claro está, la otra cara de la medalla Ojalá que algún di a nuestro pequeño país y nuestro mar tirizado pueblo puedan escribir con propiedad y a par tir del mismo impulso estos dos nombres originales.

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